¿Una forma de buscar aislamiento y concentración hasta llegar al ring ? Quizás una forma de apoyo, de protección ?. Son importantes esos pasos hasta subir las escaleras. Una fuerte unión con la esquina. Curiosamente una unión dificil de mantener cuando te quitan la bata y alguien grita “box”
Una cuestión de solemnidad. Una puesta en escena necesaria incluso aunque la fuerza y la técnica sean suficientes. El boxeo también es espectáculo. Una parte da confianza y sensación de poder al boxeador, otra parte es puro exhibicionismo. Al final todo forma parte de la identidad y nos habla de lo que hay debajo de esos guantes y esa bata.
Pluto, Cristian Montilla, no es solo un boxeador, una vez más llevó su vocación de soldado profesional hasta el interior de las cuerdas, ofreciéndonos una imagen diferente de una entrada a ring.
El lobo que permanece en su guarida —dijo Herger— nunca consigue alimento, como tampoco obtiene la victoria el hombre que duerme.
Solo en mi interior se encuentran las verdaderas respuestas. Escucho mi cuerpo y siento cada músculo perparado para la batalla. Relajo mi mente, visualizo cada movimiento. Fuera de mí no hay nada. Murmullos que se convertirán en gritos cuando pise la lona. Ahora y aquí , silencio. Todo lo que seré ahí fuera depende de lo que soy aquí. Un poco más y con derrota o con gloria, todo habrá terminado.
Después de una pelea de 12 asaltos, Sergio Martínez recupera su cinturón de WBC del peso medio.
Tras 11 asaltos de pleno dominio argentino en los que Chávez regalaba la pelea y casi todo el desgaste lo hacía Sergio , el mejicano resurgió de sus cenizas para darnos un buen susto y con unos buenos golpes mandó a la lona al de Quilmes. Sergio aguantó bien esos úlimos segundos y se pudo proclamar campeón de forma merecida.
La decisión de los jueces fue unánime 117-110 / 118-109 / 118-109. Pudimos ver una pelea limpia.
